Hace un par de días salió al aire una campaña que me ha llenado de indignación y vergüenza.
Vergüenza porque pertenezco al área profesional de la comunicación y me da pena que a estas alturas, en nuestro país, estemos haciendo “publicidad barata y dañina” sabiendo que tenemos muy buenos profesionales en el área.
Indistintamente de mi vida profesional, está mi vida de fe y una no camina sin la otra. En este sentido debo decir que tanto a nivel moral, como social, como religioso esta campaña ha superado las expectativas de la bajeza y de la mezquindad.
Vivimos en una sociedad en la que se fomentan los antivalores y esto no es ningún secreto. Lo vemos en cantantes, en los programas de TV, Radio, Prensa, Vallas, Internet…en todas partes.
No obstante, que una marca masiva, se preste para fines tan viles de corrupción moral es repugnante.
Voy a dejar aquí algunos de los artes y el link del comercial para que verifiquen ustedes mismos la cantidad de mensajes llenos de putrefacción que esta marca está liberando todos los días a nuestra sociedad.
Nos quejamos de que no tenemos el país que queremos, sin embargo permitimos que basura como esta sea puesta al aire. Esto es contaminación para nuestros hijos, para todos nosotros, para las generaciones presentes y futuras.
La publicidad y los medios tienen una incidencia en el comportamiento de casi el 90% según los estudios. Cuando has escuchado un mensaje más de 3 veces ya este ocupa un espacio dentro de tu cabeza. Esta allí, en algún lugar y si continuas escuchándolo, de momento te encuentras cantando el Jingle del tema musical o repitiendo alguna frase sin darte cuenta. Esto es fácil de comprobar, lo puedes ver cuando por ejemplo vas a algún sitio y ponen una música pegajosa, que tiene una melodía bonita pero la letra es una porquería y te dejo un ejemplo:
“Felices los 4”
…Y si con otro pasas el rato
vamos a ser feliz, vamos a ser feliz
Felices los 4
Te agrandamos el cuarto
Y lo hacemos otro rato
Y lo hacemos otro rato
Y lo hacemos otro rato
Y lo hacemos otro rato (alright, alright baby)
Y lo hacemos otro rato
Lo nuestro no depende de un pacto
Disfruta y solo siente el impacto
El boom boom que te quema, ese cuerpo de sirena
Tranquila que no creo en contratos (Y tú menos)
Sin dudas, “Maluma Baby” está “pegao” como dice la gente…pero ¿que es lo que está pegando?, porquería, basura, degeneración, putrefacción, antivalores. Y pregunto yo, ¿es eso lo que queremos para nuestros hijos?, para nosotros mismos?. Donde quedaron las relaciones de fidelidad en las que se valora la persona, la entrega, la donación?, Hoy venden todo “a lo que yo quiera” y “como yo me sienta”…como si fuéramos a vivir en este mundo para siempre. Otro engaño mas del mal espíritu.
Entonces…continúo con la teoría: Sabemos que está mal, sin embargo la cantamos y permitimos que nuestros hijos la canten que es peor; y se nos va pegando el estribillo y la musiquita y cuando menos lo pensamos ya estamos repitiéndolo. Eso mismo pasa con la publicidad, tal cual.
Y me atrevo a decir que es peor porque está hecha para influenciar. El fin de la publicidad es vender, NO TIENE OTRO FIN. El fin es influenciar, busca meterse en el consciente y en el subconsciente de la gente para lograr cambios, manipular decisiones, alcanzar nuevos comportamientos. Sabiendo esto, me atrevo a decir que Viva se ha prestado para alcanzar los más bajos ideales del hombre, tratando de venderle “verdad” por mentiras, con medias verdades….(¿no se les parece conocido el escenario a otro en el que aprecio una manzana y una serpiente? ).
Hay que aprender a ver con ojos críticos lo que nos rodea. Verlo, denunciarlo y actuar en conformidad; y cuando hablo de denunciarlo me refiero a desenmascararlo, delante de nuestros hijos, de nuestras familias, de nuestros amigos. Tal vez no tenemos los recursos para armar una campaña en contra, pero no somos tontos y podemos decirlo en las redes, en nuestros ambientes.
“Viva” se ha prestado para apadrinar la ideología de género y se ha prestado también para apadrinar la idolatría al dinero en la que no importan los medios sino el fin, así sea “chapeando”, “denigrando mi cuerpo”, “haciendo lo que me dé la gana, cuando me dé la gana”, eso….no es libertad, al contrario, eso es ser preso de los más bajos instintos y del egoísmo.
“Viva” puede darse el lujo de decir que es la primera marca que ha sacado un comercial al aire con parejas del mismo sexo agarradas de la mano y no solamente del mismo sexo sino que si se fijan en el comercial, sutilmente el t-shirt que llevan puesto, cambia indicando que no importa lo que seas, o sea tu puedes ser lo que tú quieras, mujer, hombre, trans, bi, les, etc. Puedes cambiar cuantas veces quieras en tu vida, … según tus intereses; y no hablemos por favor de amor o desamor porque no está aquí eso en juego, respeto a todos como hermanos que somos, lo que está en juego es la depravación y la desvaloración de la persona en su totalidad pues una persona que no siquiera sepa quién es o no sea fiel a su propia naturaleza, como podrá ser fiel a nada más?, Están jugando con fuego y lo que quieren es lograr individuos perdidos, que no tengan principios, que no tengan identidad. Con la perdida de la identidad, la persona se desmorona, no es nada, pierde el sentido de la vida y entonces se vuelve presa de los más bajos ideales y valores quedando así a la deriva de lo que le muestren o indiquen hacer.
Otra cosa a resaltar es que de innovadores nada, es una vil copia de otra basura que circula en otro pais, la marca es Digicel, veanlo por ustedes mismos.
El otro aspecto indignante es que como es publicidad, sale a todas horas, no tiene restricción y lo ven niños, jóvenes, todo mundo; por eso es importante hablarlo frente a ellos, hacerles ver dónde está el caramelo envenenado como la manzana de blanca nieves, que vino en una bonita fruta.
El mal crece cuando alguien lo permite. Algunos han emitido juicios sobre los dueños de la marca en cuestión. Yo tengo mis reservas sobre esto. Creo que por vanidad, por adulación se permiten grandes males; así como Herodes Antipas permitió que le cortaran la cabeza a Juan Bautista por vanidad, por no quedar mal, por idolatría a el mismo, así este dueño de la marca, aprueba y permite esta campaña, en la que se invierten miles de pesos, para ser adulado por sus vasallos…como el cuento aquel “El Traje nuevo del emperador”.
Quiero aprovechar para comentar que NO todas las marcas se prestan a estas sinvergüencerías. Tenemos marcas muy buenas que fomentan la responsabilidad social, que fomentan las buenas costumbres, que fomentan el bien, la salud, la vida, el trabajo honesto.
El grupo que está detrás de todo esto, hila muy fino sus estrategias y encuentra personas que “patrocinan” sus ideas. El fin de todo esto es la imposición de una cultura de muerte que no lleva a nada positivo. Una imposición de mentalidades e ideologías que desde el principio está muerta porque nada impuesto es libre y solo la verdad es que nos hace libres; y esa verdad es Cristo, verdad, camino y vida.
Termino con una frase de San Pablo que nos consuela: “Allí donde abunda el pecado, sobre abunda la gracia de Dios”. Hagamos el bien y mantengamos despierta la conciencia para poder tener un futuro cada día más esperanzador. De mi parte, algunas marcas, las saque de mi consumo, “Viva” es ahora una de ellas.
Dios les bendiga